Dia 30: Transformación a través del sufrimiento
Aprende como sufrir
– Los 5 Verbos de Aprendizaje: Celebrar
Pero tú has seguido bien mis enseñanzas, mi manera de vivir, mi propósito, mi fe, mi paciencia, mi amor y mi fortaleza para soportar, y has compartido mis persecuciones y mis sufrimientos, como los que tuve que soportar en Antioquía, Iconio y Listra. ¡Qué persecuciones sufrí! Pero el Señor me libró de todo ello.
2 Timoteo 3:10-11
Felicidades por terminar la primera serie del ADN del discipulado. Esta próxima serie, que también toma sólo un minuto al día, está diseñada para ayudarte a llevar a una o dos personas a través de la primera serie. Deben poner en práctica el ADN del discipulado leyendo las Escrituras (lo cual corresponde a la D de verdad Divina); reuniéndose semanalmente a través de los 40 días para discutir las preguntas (esto es la N de relaciones Nutritivas); y orando por obreros para la cosecha (con lo cual practican la A de misión Apostólica). A medida que aprenden a poner el ADN espiritual en práctica, vamos a ver algunas cosas adicionales que podrán ayudarle a tus aprendices. Si no tienes a nadie a quien invitar a hacer los 40 días de Discipulado, ora para que Dios te dé a alguien a quien puedas invitar. Dios quiere que seas un obrero y probablemente ya tienes a alguien que está esperando ser discipulado. Nosotros lo o la iremos guiando a través de la serie 1 e iremos revisando algunos puntos contigo a través de la segunda serie para que puedan compartir ideas, lo cual te traerá nuevos retos para que sigas creciendo.
Para reflexionar:
- ¿Qué te gustaría aprender en los próximos 40 días?
- ¿Hay alguien que te conozca, como Timoteo conocía a Pablo?
Haz que la vida valga:
- Imagínese estar al final de su vida, luego escriba una carta para usted hoy. Dé consejos sobre lo que necesita hacer para poder decir, como Paul, que alguien más lo sabe todo sobre su vida. Considera compartir tu carta con nosotros. Esto podría ayudarlo a fortalecer su resolución.
Sediento de más?
- En tu diario, escribe lo que te gustaría ver escrito en tu lápida. ¿Cómo necesitas vivir para que eso suceda?
Orando por tí…