Mira hacia atráz
– Los 5 Verbos de Aprendizaje: Reflexionar
Por el encargo que Dios en su bondad me ha dado, digo a todos ustedes que ninguno piense de sí mismo más de lo que debe pensar. Antes bien, cada uno piense de sí con moderación, según los dones que Dios le haya dado junto con la fe.
Romanos 12:3
En la Biblia y en nuestra experiencia personal podemos encontrar ejemplos del observador, imitador, practicante, innovador y sabio constructor. Hay espacio para que todos crezcamos. Esto significa que si estás comenzando algo nuevo, debes tomarte tiempo para observar. Igualmente, si quieres ayudar a alguien a involucrarse en algo, dale tiempo para que observe sin necesidad de que se comprometa completamente desde el inicio. Luego empieza imitar algunas cosas hasta que comiences a sentirlas normales. Continúa practicando estas cosas hasta que te hagas competente. Más adelante, puedes encontrar una manera de innovar y mejorar las cosas que estás haciendo. El objetivo final es llegar a ser un constructor sabio que a través de la experiencia y del sufrimiento se convierte en obrero aprobado.
Podemos ser expertos en un área de nuestra espiritualidad y sólo ser observadores en otra área. Un conjunto de habilidades desarrolladas no garantiza la madurez en otras habilidades. Usar estos niveles de desafío puede ayudar a auto-evaluarnos y a averiguar el siguiente paso que debemos dar en nuestro crecimiento.
Para reflexionar:
- ¿En qué área quieres crecer? ¿Crees que conociendo tu nivel de desafío podrías averiguar qué hacer a continuación?
- ¿Cómo puedes aplicar el versículo de hoy?
Haz que la vida valga:
- ¿Cuánta fe te ha dado Dios? ¿Qué haces con esa fe? ¿Cómo has visto crecer tu fe a medida que reflexionas en tu viaje?
Sediento de más?
- Basado en el “sobre juicio” del versículo de hoy, escribe en tu diario cómo crees que Dios ve tu vida.
Bendiciones…